
Este batallón, con sede en el distrito de Chancay (Huaral), está integrado por cuatro oficiales, 17 técnicos suboficiales, 36 integrantes de tropa de servicio militar y un empleado civil.
Para los trabajos en Pisco, que comenzaron tras un desfile simbólico de la maquinaria por la plaza de Armas, el Ejército peruano cuenta con tres cargadores frontales, una motoniveladora, un rodillo, un tractor oruga, un tractor a ruedas, una cisterna y diez volquetes.
La municipalidad provincial de Pisco ha ofrecido un cargador frontal, que se empleará cuando la maquinaria traída desde Chancay presente algún desperfecto, refirió.
“Estamos poniendo todo el esmero, todas las ganas en que esto vaya de la mejor manera, para que de una vez Pisco se encuentre limpio de desechos. Cuando terminemos se podrán realizar trabajos de infraestructura, viviendas, sistema sanitario”, declaró a la Agencia Andina.
Recordó que las zonas priorizadas son el asentamiento humano Carlos Medrano, a pocas cuadras del centro de la ciudad; y la zona de Pisco Playa, donde se hará un perfilado (nivelado compactado) de las entradas a la orilla del mar.
Ante las denuncias de actos vandálicos en esta última localidad, el jefe militar solicitó el apoyo de la Policía Nacional a fin de mantener la seguridad de la tropa y la maquinaria.
El batallón se aloja en la base de la Fuerza Aérea en Pisco, pero una parte irá a un campamento ubicado en el parque zonal de la ciudad, cerca de Pisco Playa.
Dijo que, a fin de dejar constancia del trabajo realizado, se tomarán fotografías de las zonas antes y después de ser intervenidas; y, al finalizar, los vecinos firmarán un acta en la que darán fe del cumplimiento de lo ofrecido.
“En 2007, el Ejército hizo un trabajo similar en estos lugares, pero ahora hay nuevamente escombros; esto obedece a que las familias han estado haciendo remodelaciones en sus casas”, observó.
Sobre el destino final de los desechos, adelantó que serán acumulados en un botadero a 15 kilómetros del centro de la ciudad sureña.
“Sabemos que la población tiene mucha expectativa de lo que hará el Ejército. El personal, oficiales, técnicos, suboficiales y tropa, me ha manifestado su deseo de servicio. Hemos visto mucha receptividad de parte de la población y nos alegra. Esperamos que nos sigan alentando y apoyando, porque al final este es un trabajo de todos”, añadió.