Un sismo de magnitud 8.8 dejaría al menos 4,582 personas fallecidas y otras 402 desaparecidas en la región Áncash, según la la evaluación de daños del Centro de Operaciones de Emergencia Regional (COER) tras el simulacro multipeligro, que se efectuó hoy en todo el país.
El coordinador del COER Áncash, Enrique Mendoza Urcia, informó que al consolidar los datos contabilizaron 45,521 afectados y 21,408 damnificados; además de daños en las viviendas, instituciones educativas, establecimientos de salud, áreas de cultivo, vías de transportes, puentes y otros.
Señaló que el ejercicio de hoy sirvió para poner en práctica los protocolos y sistemas de comunicaciones vía radio HF con el Centro de Operaciones de Emergencia Nacional (COEN) con la laguna Palcacocha, las subestaciones de la Diresa y la base del Ejército del Perú BIM 06. También se probaron los sistemas de comunicación vía radios con nodos de Sernanp.
Se resaltó la activa participación de la población e instituciones públicas y privadas en las capitales de las provincias más grandes de la región: Chimbote (provincia del Santa) y Huaraz.
El sonido de las sirenas a las 10:00 horas marcó el inicio del ensayo que simuló un terremoto con epicentro a 60 kilómetros del Callao. Las delegaciones con total responsabilidad y realismo procedieron a evacuar y actuar tal cual lo harían ante un desastre de esta magnitud.
En el caso de la zona costera, el “terremoto” vino seguido de un tsunami, mientras que en el callejón de Huaylas la consecuencia del movimiento telúrico fue un aluvión y en la zona de los Conchucos, un deslizamiento.
Homenaje
En Huaraz fue imposible no recordar a las víctimas del terremoto que azotó esta región en 1970 y que ha sido catalogado como uno de los más destructivos en la historia del Perú.
Con banderas izadas a media asta, un minuto de silencio y la herida abierta por la tragedia que enlutó a más de 70,000 familias se hizo un homenaje póstumo a quienes perdieron la vida en aquel desastre.