La noche del domingo 1 de marzo, la Policía Nacional del Perú (PNP) halló el cuerpo de Camila, una niña de 4 años que fue secuestrada por un sujeto en Independencia. Ella y su hermana de 2 años habían quedado al cuidado de una menor de 9 mientras su mamá estaba en una fiesta.
Tras el hallazgo de la pequeña, Edwin Valle, su papá, comentó que sospecha de la pareja de la madre de sus hijas. Contó que su hija había alertado a su mamá y a su tía de que el sujeto, identificado como Cristopher, la había besado.
“La hermana de mi expareja me dijo ayer que un día estaba con la mamá de mi hijita y que ella se acerca y le dice ‘Cristopher me besa’. ¿Quién es Cristopher? Es la pareja de la mujer. Una bebé siempre dice la verdad. Pero no tengo pruebas. No puedo culpar a nadie”, afirmó Valle, quien se encuentra en los Estados Unidos.
El miércoles 26 de enero, Edwin se comunicó por última vez con Camila, quien llegó a Lima con su madre y su hermana de 2 años la primera semana de febrero de este año. Antes, las niñas estaban quedándose con su suegra.
“Yo conozco a su abuela. Su abuela es una buena persona. Cuando su familia le dijo para que se vayan a la sierra, ella (la madre de Camila) dijo que se iba a ir a Payet (Lima), donde su tía. (…) Nadie le prohíbe que vaya a la fiesta, pero la hubiera dejado con alguien responsable. Una persona mayor. No con una niña. Una niña también necesita cuidados. ¿Cómo se puede confiar en una niña?”, indicó en entrevista con Latina.
El padre de Camila pidió a las autoridades que investiguen el caso y que se haga justicia. También exigió que sean sus familiares quien queden a cargo de su otra niña de 2 años.