Analistas señalaron que alta desaprobación en regiones responde a la sensación de la población de que el gobierno no escucha el interior del país.María Elena Castillo
La popularidad del presidente Ollanta Humala ha caído considerablemente. Según la encuesta de Datum, el 43% aprueba su gestión, registrando una baja de 12 puntos con respecto a mayo; mientras que para CPI la caída ha sido de 3.8%, conservando el respaldo del 45.7% de los peruanos.
Ambas muestras revelan que la desaprobación ha registrado un aumento. En el caso de Datum, pasó de 37 a 49%; y en el sondeo de CPI, subió de 41.1 a 43.5%. En las dos encuestas la cifra se incrementa aún más en el interior del país.
Para los analistas, este aspecto es sintomático y evidencia que la caída del apoyo del mandatario tiene su origen en el mal manejo de los conflictos sociales y en el viraje que ha tenido con respecto a sus promesas electorales.
El sociólogo Aldo Panfichi advierte que estos temas han generado un cambio radical.
«En las elecciones el principal voto del candidato Humala vino de provincias. La situación se ha invertido y hoy su mayor apoyo es de Lima», sostuvo.
Explicó que los resultados de las muestras revelan que las regiones consideran que el presidente ha «limeñizado su agenda» y le han quitado su respaldo porque sienten que sus necesidades y problemas no son importantes para la capital, que no son escuchados.
Asimismo, indicó que los últimos conflictos sociales han dejado la sensación de «mal manejo por ausencia», pues se ha visto a un Humala que prefiere visitar a la selección de fútbol y recibir artistas, que resolver los problemas en el interior del país.
desconectado.
Por su parte, el analista político David Sulmont indicó que Humala pasa por un proceso de desconexión con los pobladores de las diferentes regiones, especialmente donde se han producido los últimos conflictos sociales, como Espinar y Cajamarca.
«En las regiones se percibe al gobierno como un ente alejado, que no se preocupa por sus demandas. La población de estas zonas siente que está perdiendo la conexión que tuvieron con el presidente durante su campaña electoral», afirmó.
El inadecuado manejo de los conflictos sociales ha ejercido una gran influencia en el creciente desapego de la población de provincias.
«El gobierno se mostró duro e inflexible, algunos funcionarios los trataron de revoltosos. Sintieron que no hubo real voluntad para escuchar sus pedidos y necesidades. Ahora pasan la factura», manifestó.
Precisamente por ello, para los entrevistados por CPI, el principal error del gobierno es no solucionar el conflicto minero. Para ellos, el segundo desacierto es no cumplir con las promesas electorales.
«Se percibe que hay un viraje muy grande entre el candidato Humala, que se mostró más sintonizado con sus demandas, y el presidente Humala, que dice que no se debe a sus electores, sino que debe gobernar para todo el país», comentó.
Por otro lado, destacaron que la primera dama Nadine Heredia tiene más aceptación que el propio presidente, pese a haber caído 5 puntos en comparación a la encuesta de Datum de mayo. Aún así tiene un envidiable 55%.❧
HUMALA EN LA MIRA DE EUROLAT
En el parlamento europeo, la vicepresidente de la comisión de Asuntos Económicos de Eurolat, Catherine Greze, interpeló a Humala por su viraje político tras ganar las elecciones, y por cómo afronta los conflictos.
Le recordó que en la campaña electoral se encontraron en Bruselas, y le expresó su voluntad de cambiar el modelo económico peruano, basado en la comercialización de materias primas.
Mostró su preocupación por los proyectos mineros y los 250 conflictos socioambientales, entre ellos los casos de Cajamarca y Espinar.
Por otro lado, el español José Ignacio Salafranca dijo que el discurso de Humala provocó impresión positiva en el Parlamento Europeo.
DATOS
Inauguración. En Chincheros, Andahuaylas, el presidente Humala dio inicio al Programa Rutas Solidarias: bicicletas rurales para llegar a la escuela, y recalcó la importancia de la educación.
Trámite. Antes, el presidente había dicho que su gira por Europa tuvo balance positivo y la justificó diciendo que no podía delegar su participación en el Parlamento Europeo, por el TLC.